No somos ajenos a la
evolución, aún podemos experimentar cambios que nos permitan seguir adaptarnos
al entorno. Eso sí, nuestra especie es la única que potencia el proceso con implantes y ajustes genéticos.
En los últimos 150 años
desde que el naturalista Charles Darwin nos abriera los caminos de la evolución
con las extraordinarias intuiciones, los científicos han podido comprender
mejor la de nuestra especie. El proceso, como en cualquier otro animal se ha
desarrollado durante millones de años y se remonta a un misterioso y lejano
ancestro con los primates.
No obstante, sólo en las
últimas decadas los biólogos evolutivos han logrado resolver algunos de los
mecanismos que nos han conformado tal y como somos hoy. Y , sin embargo, es más
arduo intentar adivinar cómo será nuestro futuro.
¿ Seguiremos
evolucionando? ¿ Intervendremos de alguna manera en ello?
Y si fuera así,¿Cómo
seremos los humanos con el paso de los año?
Un antropólogo asegura que
la evolución se desarrolla unicamente cuando las especies viven en espacios
reducidos exactamente lo contrario de lo actual
en un mundo cada vez más globalizado como el
actual.
La evolución genética
avanza mucho más con padres varones de más de 50 años cosa que no pasa
actualmente porque se tienen sobre los 30.
En palabras de un
genetista conocido la especie humana se ha puesto en marcha un proceso
involutivo.
Según un científico
conocido el “homo sapiens” podría extinguirse en los próximos 100 años debido a
la explosión demográfica y el consumismo
fuera de control.
Otro sabio dice que la
humanidad no es más que un soplo en el contínuo flujo de la vida.
La superpoblación
originará cambios cada vez más acelerados.
Nuestros descendientes
serán unos tipos listos y cabezudos.Tendremos unos cerebros más grandes con una
frente más amplia y capas corticales más grandes.
La nueva tendencia en
nutrición también nos ayudará a darnos forma.
Juan C.